Crónica de la Maldad en Venezuela

en lara 

ASESINAN A TAXISTA DE 28 AÑOS DE UN TIRO EN LA CABEZA

Tras resistirse al robo, un delincuente acabó con la vida de Wilfredo Rubén Darío Rondón Rosendo (28), quien tenía diez años trabajando como rapidito. El hecho se registró a las 8:30 de la mañana de ayer en la calle 6 con avenida principal del barrio José Félix Ribas. Se trata del profesional del volante número 26, asesinado durante el 2012.
Diez años trabajando como taxista tenía Rondón Rosendo. Cubría la ruta desde La Pasarela hasta La Carucieña. Sus labores comenzaban a las 6 de la mañana y terminaban entre 6 y 7 de la tarde por lo peligrosa que estaba la ciudad. En tres oportunidades lo habían intentado robar, pero por fortuna no había pasado nada malo. Sus seres queridos siempre lo aconsejaban, pero “El Pelón” como lo llamaban de cariño, debía mantener su hogar.
La rutina del profesional del volante fue la misma: a las 6 de la mañana salió de su residencia ubicada en Cerritos Blancos, abordó su Chevrolet Impala dorado, signado con las placas KBD52C, y comenzó con su labor diaria. Se presume que era la tercera vuelta que daba “El Pelón” cuando, al oeste de la ciudad, montó a un sujeto moreno quien vestía una chemise roja y se subió en la parte de atrás del rapidito.  
Aparentemente este sujeto esperó que el carro quedara solo y en ese instante lo sometió. Cuentan algunos testigos que el vehículo dorado venía en zigzag por toda la avenida principal del barrio José Félix Ribas y justo en la calle 6 cruzó a mano izquierda, perdiendo el control y estrellándose contra un cyber.
La puerta izquierda de la parte de atrás del carro se abrió y se bajó el sujeto moreno. Algunas personas creyeron que era un pasajero, pero resultó ser el presunto homicida, pues portaba un arma en la mano y en la esquina fue “rescatado” por otro hombre moreno en una motocicleta roja y escaparon con rumbo desconocido.

La noticia se regó
Compañeros de labores, al ver que el vehículo de “El Pelón” estaba estrellado, se bajaron para ver qué sucedía y vieron su cuerpo ensangrentado sobre el asiento del chofer, su mano izquierda aún estaba sobre el volante y la derecha reposaba sobre el asiento. Las llaves del rapidito estaban pegadas al carro.
El taxista vestía blue jeans, zapatos deportivos negros y camisa azul. Sus compañeros buscaron una sábana y le cubrieron el rostro, pues un disparo en la cabeza había acabado con su vida.
Hiosiris Rondón comenta que fueron los compañeros de trabajo quienes avisaron de lo sucedido a su hermano. Entre llantos la joven comentó que era una persona muy amigable, que siempre estaba para todos y cuando necesitó ayuda nadie lo auxilió.
Con su muerte quedan tres varones huérfanos de padre. Se trata de un adolescente de 15 años y dos de 6 años. Era el mayor de dos hermanos y el único varón.
Las lágrimas rodaban por las mejillas de los seres queridos, pero de forma repentina un grito desgarrador le hizo erizar la piel a todos los presentes. Se trataba de la madre de “El Pelón”.
“Dios mío, ¿ahora qué hago yo sin mi hijo?; mi único varón”, eran las expresiones de la madre, quien a la vez golpeaba el techo y la puerta del vehículo, al sentirse impotente de ver el cuerpo de su muchacho sin vida.
La mujer no podía creer lo sucedido y por largo rato con sus brazos abrazaba a su hijo, pero no paraba de llorar por lo sucedido.
Al cabo de un rato llegaron funcionarios del Eje Contra Homicidios del Cicpc, quienes hicieron sus respectivas pesquisas. En la parte de adelante del vehículo fue colectada la concha de un proyectil.
Por la forma como se dieron los hechos, investigadores manejan el caso como una resistencia al robo.

Compañeros dolidos
En lo que va de año han sido asesinados 26 taxistas en la entidad larense. Los profesionales del volante han muerto en manos del hampa y en todos los casos ha sido por resistirse al robo.
Esta situación ha obligado a muchos a protestar porque no sienten seguridad en las calles. Por la muerte de Rondón Rosendo, entre la mañana y mediodía de ayer un grupo de taxistas paralizó sus labores y trancaron la avenida Florencio Jiménez por espacio de unas horas. Los profesionales del volante una vez más exigieron mayor seguridad, en especial para la zona oeste, específicamente en la parroquia Juan de Villegas, en donde a diario se contabiliza la mayor cantidad de asaltos a los colectivos.