Cory Morris, de 21 años, asesinó a su hija de 4 meses de 22 puñetazos
porque no lo dejaba ver televisión, cuando estaban solos en su casa, en
Minneapolis, en el condado de Hennepin.
La información fue tomada por Telemundo, del sitio de noticias estadounidense Washingtonpost.com.
La crónica indica que Morris le propinó 15 puñetazos en la cabeza y 7
en el pecho a su hija Emersyn. Después de cometer el asesinato llamó a
su madre y a su mujer y les dijo que había hecho algo malo, pero no les
explicó lo que hizo, según informó Mike Freeman, fiscal del condado de
Hennepin.
Los bomberos acudieron a la vivienda y encontraron a la bebé tirada en
el suelo sobre un charco de sangre y con salpicaduras por toda la pared.
Por su parte, Metro apunta que el hombre tenía rastros de sangre en la piel y la mano derecha hinchada.
Morris fue detenido y está acusado de asesinato en segundo grado, se le estableció una fianza de USD 2 millones.
El fiscal dijo que Morris tendrá que ser evaluado mentalmente.

1 Comentarios
Un tiro y ya.
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