l callejón San Jaime del sector Valle Frío de Maracaibo..

Lo que hoy sería un festejo de los nueve años del niño Ismael Alejandro Aguirre Gómez, se convirtió en funeral luego que tres hombres y una mujer, queriendo hacer justicia con sus manos para atrapar a un delincuente, le quitaron la vida al pequeño cuando se asomaba por la ventana de su casa para averiguar de dónde salían los disparos que escuchaba a las 11 de la noche de ayer en el callejón San Jaime del sector Valle Frío de Maracaibo.

Los balazos despertaron a media vecindad de ese sector perteneciente a la parroquia Santa Lucía. Pocos minutos antes un delincuente apodado “El Meme”, llegó hasta una residencia en cuyo frente se encontraba Roselín Chiquinquirá Carreño Figueroa (30), conocida entre parientes y vecinos como “La Gata”. La intención era quitarle el teléfono celular que la mujer tenía en sus manos y bajo amenaza de muerte lo logró, revelaron fuentes de la policía científica.

El niño Ismael Alejandro iba a cursar el cuarto grado

La víctima corrió adentro de su residencia para buscar ayuda. Conocía de vista al hampón y al describírselo a su tío Juan José Carreño Viloria, conocido como “Papa Oso”, descubrieron quien era. Este último y dos amigos que allí se encontraban, Ronald Enrique Gómez Graterol, apodado “Mama Osa”, y un sujeto hasta ahora conocido como “Yitri”, salieron persiguiendo a “El Meme”, quien es pariente del niño Ismael Alejandro y reside a unas cuatro casas del pequeño, en el callejón San Jaime.

Edgar Antonio Gómez Pérez, abuelo del menor de nueve años, con quien vivía, relató esta mañana que los disparos lo levantaron y que el sector se asemejaba al lejano oeste. Indicó que “La Gata” dirigía el grupo e instigaba a que dispararan. Los hombres se subieron en la platabanda de la casa del frente donde él habita y desde allí dispararon. “Ella les decía: ¡denle plomo!”, aseveró Gómez.

También comentó que a quien buscaban es familiar de su mujer y quizás pensaron que lo ocultaban en su casa. “En la casa estaba yo con mi mujer, Ismael Alejandro y  una niña de cinco años (…) Nos levantamos por los balazos y cuando mi nieto se asomó al callejón por la ventana recibió en el pectoral un balazo efectuado por “Mama Oso”, dijo.

Ronald Enrique Gómez Graterol, autor material de la muerte del niño

Manifestó que de allí todo fue desesperación y él con el propio matador, llevaron al niño en su auto Optra plateado al Hospital Coromoto, pero llegó sin vida. Desde entonces todos se perdieron, pero el CICPC arrestó a “La Gata”.

Dijo que la madre de Ismael Alejandro, María Gómez, no vive con su nieto, pero ayer lo llamó pues hoy le traería una torta para festejarle el cumpleaños. El infortunado infante era el mayor de tres hermanos e iba a cursar el cuarto grado en el colegio Simón Rodríguez. Entristecido comentó que Ismael era un niño entusiasta, alegre, brincón y cariñoso.

Ayer al mediodía el cuerpecito les fue entregado a sus familiares en la morgue forense. Al unísono pidieron justicia y la pronta captura del asesino.