El desabastecimiento en los supermercados ha provocado que los pasillos sean reducidos con la eliminación de estanterías y la reducción de la nómina de empleados.
Un establecimiento ubicado en Playa Grande, estado Vargas, pasó de contar con seis corredores repletos de productos a solo cuatro en diciembre del año pasado, reseñó La Verdad de Vargas.
Los empleados también se vieron afectados, ya que de 16 trabajadores pasaron a ser solo 11 porque las ganancias no son suficientes para cubrir los aumentos salariales.
Actualmente, los anaqueles están llenos de refrescos, chucherías, detergentes y envases de agua mineral.
Lea más en La Verdad de Vargas.Cada vez es más notorio el desabastecimiento en los supermercados, que al quedarse sin mercancía se ven en la obligación de reducir los pasillos. Tal es el caso de un establecimiento ubicado en Playa Grande, Urimare, el cual pasó de contar con seis corredores repletos de alimentos a solo cuatro desde diciembre 2017.
Esta situación también afectó a los empleados, pues la nómina fue reducida de 16 trabajadores a solo 11 porque “las guanacias no dan para el pago de los aumentos salariales ni del bono de alimentación”, comentó una de las trabajadoras.
“La mercancía no está llegando como antes o por lo menos como hace tres años atrás. Los productos importados son muy caros y la gente no se los lleva. Nos llegaron unos paquetes de papel higiénico y se quedaron fríos, porque cuestan más de una quincena de un trabajador que gana sueldo mínimo”, expresó con molestia.
Actualmente, los anaqueles los llenan con refrescos, chucherías, detergentes y envases de agua mineral. “No tenemos nada de alimentos. Los productos Polar llegan cada 15 días o a veces cada mes, pero el mismo día que llegan, se venden”./LB/va
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