Joven poseído por el demonio mató a su madre y a su abuela en Machiques ZULIA

Joven poseído por el demonio mató a su madre y a su abuela en Machiques

 

 

A Yohandry Arrieta lo tenían amarrado y le habían hecho una limpieza espiritual; pero tras zafarse trituró el cráneo de su madre y de su abuela con una piedra

Francisco Molina.- Un dantesco crimen estremeció, la madruga de este domingo, a la comunidad del caserío El Llano en el municipio Machiques de Perijá, luego de que un joven de 19 años matara a pedradas a su madre y a su abuela.

Desde el pasado sábado, Yohandry José Arrieta Gómez estaba siendo sometido a una limpieza espiritual en el interior del abasto Macoita, donde residía con sus familiares. Al parecer, el joven estaba poseído por el demonio.

Según vecinos de la comunidad, a Yohandry lo mantuvieron su madre y su abuela amarrado por más de cinco horas en el patio de la casa para hacerle el ritual de limpieza.

Alrededor de las 3:00 de la mañana de este domingo, Yohandry logró zafarse del amarre y fue hasta el otro cuarto, donde trituró el cráneo de Basilisa Gómez, de 75 años y el de Fany Raquel Arrieta Gómez, de 50 años; su abuela y su progenitora, respectivamente.

El hermano menor de Yohandry lo sorprendió e intentó impedirle su violenta acción; pero también fue atacado a pedrada. Sin embargo, logró escapar y pedir auxilio a sus vecinos, quienes sometieron al jovencito.

Lo amarraron nuevamente dentro de su habitación y dieron parte a las autoridades del atroz crimen cometido en la parroquia Libertad de Machiques de Perijá; pero, alrededor de las 7:00 de la mañana, se zafó de nuevo y huyó por una de las ventanas.

Funcionarios del Cicpc, adscritos a la subdelegación Machiques, lo recapturaron minutos después divagando muy cerca del caserío. Tras el interrogatorio policial, Arrieta Gómez declaró que actuó por “orden del demonio”, porque ambas mujeres eran impuras.

Yohandry Arrieta tenía pocos días de haber llegado a Machiques, procedente de Caracas, donde vivía con un familiar. Fue remitido a la sede principal del Cicpc, en la capital zuliana; mientras que a los cadáveres los remitieron a la morgue forense de Maracaibo.